Hoy en día, el hecho de que la firma electrónica es jurídicamente equivalente a la firma manuscrita es conocido por la gran mayoría de organizaciones pero ¿le sacamos el máximo partido posible a la firma electrónica? ¿sabemos hasta qué punto puede agilizar ciertos procesos en nuestro negocio?
La firma electrónica enfocada a la automatización de procesos es una poderosa herramienta empresarial por muchas razones. Por una parte, es indudable el ahorro de costes que conlleva eliminar la impresión de los documentos, el envío postal y las tediosas tareas administrativas y de archivo. Por otra, aumenta considerablemente la eficiencia de nuestro negocio, hecho que PricewaterhouseCoopers cuantifica en un 71%.
Pero pongamos un ejemplo práctico con cifras extraídas del Manual de Factura Electrónica del Plan Avanza:
EMISIÓN DE FACURAS
Hasta el momento, para la emisión de una factura en papel era necesario imprimirla (0.12€ por unidad) y enviarla por correo postal (0.29€ por unidad) para terminar archivándola a buen recaudo durante 4 años (tratamiento manual 0.35€ por unidad). Este proceso repetido en cada una de las facturas que emite una empresa es una considerable inversión económica que además ocupaba tiempo de trabajo poco rentable del personal administrativo de la misma. ¿Te imaginas poder automatizar este proceso?
En esta infografía puedes descubrir la herramienta que te permitirá hacerlo:
«eSignaBatchServer es una solución que se integra con el backoffice del cliente y permite la firma electrónica y envío de documentos a terceros de forma masiva y desatendida.»